Cali será el epicentro de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre biodiversidad, cuyo objetivo es abordar aspectos clave para la preservación de la vida
La COP es el órgano de toma de decisiones de una convención internacional. En el caso de la Convención por la Diversidad Biológica, CDB, su conferencia se celebra cada dos años para evaluar los avances y establecer nuevos objetivos en la conservación de la biodiversidad y su uso sostenible.
La CDB es un tratado mundial ratificado por todos los países de la ONU a excepción de Estados Unidos. Sin embargo, esta CDB también es ratificada por países que no están en la ONU como Palestina. Su objetivo principal es “la conservación de la biodiversidad, el uso sostenible de sus componentes y la participación justa y equitativa de los beneficios resultantes de la utilización de los recursos genéticos”.
Esta convención nació de la Cumbre de la Tierra llevada a cabo en Río de Janeiro en el año 1992 y dio origen a tres convenciones internacionales que versan sobre: cambio climático, diversidad biológica y lucha contra la desertificación. Cada una de ellas cuenta con su propia Conferencia de las Partes COP para abordar sus desafíos específicos.
Para comprender la importancia de la COP16, es fundamental considerar su antecedente inmediato, la COP15. Esta conferencia, presidida por China y organizada por Canadá en Montreal, dio como resultado principal la adopción del Marco Mundial Kunming-Montreal siendo la continuación del Plan estratégico para la Biodiversidad 2011-2020 para el nuevo decenio. Este marco plantea 23 metas encaminadas a lograr cuatro objetivos principales, que precisamos a continuación.
Conservación, sostenibilidad y justicia
El objetivo uno busca conservar y utilizar de manera sostenible la biodiversidad, cuyas metas clave incluyen la expansión de áreas protegidas, restauración mínima de un 30 por ciento de los ecosistemas dañados, reducción a la mitad del ritmo de pérdida de hábitats naturales y, por último, la gestión sostenible de especies exóticas invasoras mediante mecanismos de prevención y control.
El objetivo dos trata del acceso a los beneficios de la utilización de los recursos genéticos y la distribución justa y equitativa de los beneficios que se deriven de su utilización. Entre las metas de este objetivo se encuentra mejorar el acceso a recursos genéticos, el reparto justo y equitativo de los beneficios de dichos recursos.
El objetivo tres busca movilizar los recursos financieros y cumplir las metas de aumentar la financiación de países desarrollados a países en desarrollo para sacar adelante medidas asociadas a la diversidad biológica y, adicionalmente, se buscará revisar los incentivos perjudiciales vigentes que pongan en riesgo la biodiversidad.
El objetivo cuatro es fortalecer la implementación del marco a través de la planificación, el seguimiento, la evaluación y la revisión. Este propósito persigue la meta de lograr diseñar e implementar planes nacionales de biodiversidad y, consecuentemente, la generación de mecanismos de seguimiento y evaluación del marco.
Visiones contrapuestas
La COP16 se realizará en Colombia, en el departamento del Valle del Cauca. Esta conferencia presenta grandes retos, pero en el contexto local está limitada por la visión y las prioridades entre la alcaldía de Cali y el Gobierno nacional.
El alcalde de Cali, Alejandro Eder, tiene una visión enclaustrada en la lógica de concebir esta ciudad como un espacio para eventos de entretenimiento. En ese sentido, los esfuerzos del burgomaestre han estado encaminados a mejorar la percepción de seguridad de la ciudad mientras se desarrolla el evento. Además, mejorar el estado de vías principales y, como ya resulta clásico y en línea a la visión distrital, incentivar el turismo de la ciudad a partir del gran reflector de la COP16, en este caso de la mano del relato del “turismo sostenible”, poniendo la biodiversidad en relación con la capital vallecaucana y su importancia en términos netamente mercantiles.
La alcaldía busca promover una visión ambiental. Esta se encuentra resumida en su propuesta “estrella” de declarar Paisaje Cultural la caña de azúcar en el Valle del Cauca, idea que desconoce los grandes impactos generados por el monocultivo de la caña de azúcar tanto para la naturaleza ─con la reducción del bioma de bosque seco tropical y la desecación de humedales─, como para la sociedad, con la precarización y explotación laboral de los ingenios, el acaparamiento del recurso hídrico y las quemas de caña que terminan por generar problemas de salud.
Por su parte, el Gobierno nacional en cabeza de la ministra de ambiente y desarrollo sostenible Susana Muhammad plantea una mirada más de fondo. En ese sentido, aprovechando este momento histórico, el Gobierno buscará principalmente lograr un mayor reconocimiento y financiación para los países megadiversos teniendo en cuenta los avances logrados en la COP15. A la par de esto, a continuación se resaltan las tres apuestas por parte del Gobierno nacional:
Generar una reserva de biósfera
Por un lado, se plantea la iniciativa de generar una reserva de biósfera del Corredor Marino del Pacífico Este Tropical, CMAR, convirtiéndose en una reserva oceánica transnacional entre Colombia, Ecuador, Panamá y Costa Rica. El Gobierno busca ratificar e impulsar el acuerdo de Belén de Pará, firmado entre los ocho países amazónicos en miras a proteger y conservar la Amazonía.
El acuerdo promueve la cooperación regional para combatir la deforestación, proteger la biodiversidad y garantizar el bienestar de las poblaciones amazónicas, especialmente de los pueblos indígenas. La presidencia de Colombia señaló la necesidad de generar una estrategia mancomunada entre los países caribeños para así lograr de manera efectiva la conservación del mar Caribe y su biodiversidad.
Más allá de la críticas y los aspectos logísticos, la COP16 representa una importante plataforma política y ambiental para Colombia y el mundo, para promover y posicionar la visión ambiental del gobierno del cambio e incluir a comunidades históricamente marginadas, además de consolidar a nuestro país como líder regional en la conservación y recuperación de ecosistemas estratégicos a partir de sus propuestas.
Por: Gildardo Silva Molina
Información tomada de semanariovoz.com