Trabajadores de servicios públicos dicen NO al paro
Grandes Empresarios de Transporte buscan atacar a Petro afectando economía del pueblo
La Junta Directiva de Sintraemsdes Nacional y sus más de 50 subdirectivas en todo el territorio nacional, expresaron este martes 3 de septiembre, su apoyo al presidente de la República, Gustavo Petro, y el rechazo a lo que se ha identificado como el primer paso de la estrategia de desestabilización, que conduzca en cuestión de semanas a un golpe de Estado.
En una de sus primera etapas, grandes empresarios han puesto en marcha un supuesto “paro camionero”, con el que han bloqueado vías en Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Santanderes y Cauca, entre otros, con el pretexto de rechazar los incrementos en el precio del ACPM.
Diferentes autoridades en materia económica, han apoyado las decisiones anunciadas por el gobierno, y una de esas voces es la de Luis Fernando Mejía, Director de Fedesarrollo, quien calificó de responsables las medidas tomadas por el gobierno nacional en materia de precios de combustibles, ante la difícil situación fiscal existente.
Lo que la opinión pública debe saber, es que pequeños y medianos transportadores en todo el país han rechazado el paro y al contrario, han denunciado que son los grandes empresarios quienes están pagando a los conductores, hasta 150 mil pesos al día, por acompañar y generar esos bloqueos de vías, y quienes mantienen al pequeño transportador y al camionero independiente, sufriendo dificultades económicas y condiciones de explotación laboral, por los costos de intermediación.
¿Por qué sube el ACPM?
Colombia no produce todo el petróleo, el gas, la gasolina ni el ACPM que requiere, por eso parte de él se importa y el precio que se paga es un precio internacional. En el año 2020, el señor Iván Duque, creyó que para frenar la inflación, lo mejor era congelar el precio de venta del ACPM, decisión que desequilibró el fondo de estabilización de los combustibles y además afectó la situación fiscal de Colombia, al poner al país a pagar altos costos de intereses, mientras que al interior se habría un déficit al vender el combustible a precio inferior al de compra.
Representantes de los pequeños y medianos transportadores han manifestado que en realidad, el impacto del incremento en el precio del ACPM tendrá un efecto muy pequeño en materia de precios de la canasta familiar y para nada debería ser del 35% anunciado por los empresarios. No dudamos que los especuladores querrán sacar provecho de esta circunstancia para subir los precios, pero ya será tarea de los gobiernos locales controlar y evitar esa especulación.
El Centro de Estudios Económicos ANIF señaló que calculado la inflación acumulada en estos últimos 56 meses sin incremento, el precio del ACPM debería incluso ser de 3.600 pesos más alto.
El primer objetivo: afectar a la población
En solo tres días de este falso paro, son varios ya los perjuicios generados a los ciudadanos, como la muerte de una paciente transportada en ambulancia a la que se impidió el paso por la vía hacía Cúcuta, o niños de rutas escolares, trabajadores sin acceso a sus lugares de trabajo, o familias con niños pequeños, sin acceso a alimentos o agua, algo que en otros tiempo sería calificado de terrorismo.
Finalmente los dirigentes sindicales, comprenden que con la situación crítica que enfrentan las finanzas públicas, para mantener ese subsidio al ACPM se requeriría destinar recursos del presupuesto general de la nación, que podrían usarse en necesidades más urgentes.
