La intención de los trabajadores de Empresas Públicas Municipales de Belén de Umbría Risaralda, de pertenecer a una organización sindical que ayudara a velar por los derechos laborales de los trabajadores; se empezó a concretar el mes de enero del año 2008.
Para entonces y como ha sucedido en muchas partes, había cambio de administración municipal, en cabeza de un alcalde contrario totalmente a los trabajadores, y decimos contrario por sus políticas arbitrarias en todo sentido, tanto para los trabajadores como para la misma empresa.
Desde años anteriores y, por motivos de descontento en la aplicación de la administración del personal y la legislación laboral, así como la desprotección a la estabilidad laboral, por la amenaza a la aplicación del plazo presuntivo contemplado en la ley; a los contratos para trabajadores oficiales a término indefinido y otras tantas, estaba la inquietud de poder hacer valer los derechos de una manera más eficaz y bajo unos términos de ley que favorecieran de manera concreta los intereses de la clase trabajadora.
Sin embargo y como nunca se había visto la necesidad apremiante de favorecer la estabilidad laboral, muchos compañeros eran displicentes frente a la iniciativa; además por el riesgo que conlleva este tipo de situaciones en particular, quien tiene de momento la favorabilidad política del patrón se convierte en un riesgo para quienes lideren el movimiento; por lo tanto, hasta ahí llegaban las intenciones.
Hasta entonces debía obedecerse cualquier orden impartida por los jefes y el alcalde sin derecho a protestar, había que tener un apoyo irrestricto a los proyectos políticos indicados por la administración sopena de perder el puesto de trabajo, además las ordenes de realizar funciones no acordes al contrato de trabajo eran situaciones frecuentes y una serie de irregularidades para nada buenas.
El régimen prestacional y salarial era el que estrictamente aprobaba el gobierno o la junta directiva, así como los aumentos y el pago de tiempo extra era muy poco, casi nulo y la participación de los trabajadores en actividades de bienestar social muy limitadas, ningún reconocimiento real al mérito y a la formación de los trabajadores. Sin embargo, con todas estas premisas la mayoría habíamos alcanzado una antigüedad notable, que tal vez fue el motivo de conservar los puestos de trabajo sin estar amparados por una ley de estabilidad laboral.
Así las cosas, con el futuro laboral de los trabajadores de Empresas Públicas Municipales de Belén de Umbría, en manos de la nueva administración; que tenía Urgencia por cumplir compromisos de campaña dando trabajo a muchos, nuestra salida era inminente y así; dándose cuenta todos que no había más que perder y era cuestión de tiempo para ser despedidos, la idea de sindicalizarse empezó a ser llamativa.
Con estos antecedentes y contando con la inmensa fortuna que el señor Raúl Alonso Lotero Ceballos, contaba desde años atrás con amigos sindicalizados en las Empresas Públicas Municipales de la Virginia (municipio vecino); empezamos un proceso de acompañamiento y asesoría, que de hecho venía dándose desde tiempo atrás sin lograr eco en todos los trabajadores de Belén.
Los compañeros Carlos Alberto Gómez y José Antonio Osorio, reconocidos líderes en la subdirectiva la Virginia, se encargaron de organizar la primer asamblea de los aspirantes a conformar el Comité Seccional Belén de Umbría; misma que se llevó a cabo desplazando 17 de los 18 afiliados iniciales a una reunión en la sede de la Subdirectiva La Virginia y en la que se concretó el paso inicial de afiliación, obviamente las directivas de la Empresa y el alcalde del momento, ignoraban completamente el hecho.
El paso siguiente fue enviar la solicitud a la Junta Directiva Nacional de esa época, presidida por el señor Rafael Antonio Ovalle Archila, quienes reunidos en la ciudad de Cartago Valle en ejercicio de sus facultades; aprobaron la creación del Comité Seccional de Belén de Umbría; acto seguido se envió la documentación al Ministerio del Trabajo para la aprobación legal, que fue concedida el día 12 de marzo del año 2008.
Una vez la administración municipal conoció el hecho, las amenazas de todo tipo no se hicieron esperar, además la negativa a negociar, reconocer y aceptar el Sindicato fueron un asunto diario, al punto de que el primer pliego de peticiones, agotado el tiempo de ley se fue a tribunal de arbitramento, el punto central de la negociación que era ganar la estabilidad laboral fue negado de manera rotunda y así sucesivamente las demás pretensiones de los trabajadores.
Al año siguiente el presidente del Comité y Delegado Nacional, Raúl Alonso Lotero, tuvo la oportunidad de asistir a la Asamblea Nacional de Delegados celebrada en la ciudad de Medellín; donde conoció a directivos nacionales que en adelante asesorarían y ayudarían a sacar adelante la causa, agradecimiento especial al compañero Néstor Darío Monsalve Castaño, pues siempre estuvo pendiente del Comité y de que se negociara lo que inicialmente se había ido a tribunal de arbitramento, el mes de junio del año 2010, quedando constituida la primera Convención Colectiva de trabajo entre el Comité y la Empresa, con puntos tan importantes como la estabilidad laboral y otros más.
Aun ser un grupo pequeño, de 21 afiliados en la actualidad y con la mayoría en edad de pensión somos optimistas de poder mantenernos en el tiempo y defender el trabajo y todo lo que hemos ganado durante algo más de 13 años continuos de lucha. A lo largo de nuestro paso por Sintraemsdes solo hemos encontrado solidaridad de clase, amistad, manos francas y un apoyo y asesoría permanente, brindado con cordialidad y oportunidad, gracias a todos…muchas gracias.
Un agradecimiento muy especial a la Junta Directiva del comité, todos han aportado y aportan siempre lo mejor de cada uno para que esto continúe; Muchas gracias a Albeiro Rodríguez, Abelardo López, Gloria Elena Yarce, José Jesús Cardona, William Lotero, Hugo Rengifo, Rogelio Zuleta, Alberto Marulanda, Sandra Milena García, Inocencio Bermúdez, y Jhon Jairo Arias por estar siempre atentos a dar solución y ánimo en los momentos difíciles, a todos muchas gracias.
Cordialmente
JUNTA DIRECTIVA